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¿Quién es el Padre Mariano?

El Padre Mariano de Blas, L.C., nació en San Bartolomé de Pinares, un pequeño y pintoresco pueblo de la provincia de Ávila, España. Creció en el seno de una familia profundamente católica, junto a cinco hermanos y una hermana, en un ambiente de fe y valores que marcaría para siempre su camino.

Desde muy niño descubrió su vocación sacerdotal de una manera tan simple como significativa. Con apenas 10 años, al participar en un juego infantil que representaba la parábola de las almas que se salvan, entendió con claridad que quería dedicar su vida a ayudar a que todas las “flores” (almas) llegaran al cielo. Así fue como, con alegría y convicción, ingresó a la Legión de Cristo, dando inicio a una vida de entrega y servicio.

Casi 50 años de misión sacerdotal

A lo largo de casi cinco décadas de sacerdocio, el Padre Mariano ha desarrollado una amplia labor pastoral, principalmente en México, con una significativa etapa de nueve años en Estados Unidos. Su trabajo ha abarcado múltiples áreas y comunidades: fue párroco misionero en Chetumal; director de las secciones de señores en ciudades como Guadalajara, Saltillo, Monterrey y San Luis Potosí; capellán de colegios y comunidades consagradas; coordinador de apostolado; director del colegio CEYCA; y capellán en colegios Mano Amiga, entre otras muchas responsabilidades.

Durante un período también apoyó activamente a las secciones de señores de Las Condes y La Dehesa, en Santiago de Chile, desde donde fortaleció el carisma del Regnum Christi con cercanía y entusiasmo. Sin embargo, en la actualidad ha regresado a Los Ángeles, donde continúa su labor evangelizadora a través de Guadalupe Radio, medio con el que ha colaborado durante más de 18 años.

Evangelización a través de los medios

El Padre Mariano también ha sido un referente en la evangelización a través de los medios de comunicación. Desde hace 18 años conduce el programa “La alegría de vivir” en Guadalupe Radio, en Los Ángeles, donde reflexiona sobre la fe, el amor y la vida cristiana con un estilo cercano, esperanzador y profundamente humano. Su trabajo en medios comenzó con cápsulas de televisión en Saltillo, continuó en Guadalajara y Monterrey, y se consolidó en Estados Unidos, donde ha sido testigo de incontables conversiones y reconciliaciones con Dios gracias al poder de la palabra.

Ha colaborado estrechamente con Guadalupe Radio y Hombre Nuevo, dos importantes plataformas católicas, y ha producido decenas de predicaciones en formato CD y DVD, además de mantener una constante presencia en podcasts y redes digitales.

Un pionero del Regnum Christi en Chile

Su vínculo con Chile comenzó a fines de la década del 70, cuando, desde Ciudad de México, empezó a apoyar la difusión del carisma del Regnum Christi en jóvenes chilenas. Movido por el interés de Paca Rodríguez, una joven chilena que conoció el movimiento en México, y con la clara sensación de que “Dios intervenía”, el Padre Mariano ayudó a que el Regnum Christi echara raíces en el país.

En julio de 1978 se incorporaron las primeras jóvenes, y en diciembre de ese mismo año se vivió una histórica ceremonia de incorporación de 29 alumnas del Colegio Villa María, en San Francisco de Mostazal. Desde entonces, ha mantenido un fuerte lazo con la misión del Regnum Christi en Chile.

Escritor y formador

El Padre Mariano es también autor de 19 libros publicados —con nuevos proyectos en desarrollo—, todos enfocados en la espiritualidad católica, el encuentro con Cristo y la aplicación concreta del Evangelio en la vida cotidiana. Actualmente trabaja en un nuevo libro titulado “Personajes de la Biblia”, en el que cada figura habla desde su propia experiencia, conectando su testimonio con la vida de los lectores.

En su incansable deseo de compartir la Buena Noticia, planea traer varios de sus libros editados en Los Ángeles para ponerlos a disposición del público chileno.

“Sigo jugando a lo mismo”

A pesar de los años, el Padre Mariano suele decir que aún sigue “jugando a lo mismo” que cuando era niño: ayudar a las almas a llegar al cielo. Hoy lo hace no solo desde el púlpito o el confesionario, sino también a través de la radio, la escritura y el acompañamiento espiritual cercano y constante de quienes se cruzan en su camino.

El Regnum Christi, dice, le cautivó por su amor a Cristo, a la Iglesia y al Papa, por su espiritualidad profunda y sus grandes obras. Ese carisma sigue siendo su inspiración y su misión.

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